Opiniones diversas, reacciones mixtas y la innegable violencia racista que abunda en Latinoamérica se han hecho sentir dentro y fuera de las redes sociales estos últimos años, cuando personajes fantásticos como La Sirenita, recientemente El Hada Azul e incluso personajes de ficción que se desempeñan dentro de un universo totalmente común como un ambiente escolar, son interpretados por mujeres negras.
Argumentos como: “deben crear sus propias historias” o “porque no es una princesa africana”, o “la sirenita es blanca porque es danesa” son comunes entre los usuarios; y un porcentaje preocupante de personas adultas que realmente están repitiendo estas opiniones racistas y excluyentes sin pensar en las infancias, que son realmente el punto central de la representación y son para quienes se están creando estas nuevas versiones o adaptaciones de clásicos del cine y la literatura universal, que en su momento fueron concebidos desde una visión eurocentrista, blanca y excluyente.
¿Qué es la representación y por qué nunca será o estará forzada?
La representación es una herramienta y también un objetivo dentro del movimiento antirracista, como también dentro de otros colectivos como el LGBTIQ+, y es una manera, orgánica, justa y efectiva, de retomar espacios en el cine, la televisión, el teatro y en todo espacio público o privado que tenga un impacto en la sociedad y que pueda ayudar a otras personas, especialmente a la juventud y a las infancias a sentirse parte de la sociedad que históricamente les ha borrado e invisibilizado por completo. En el caso de las infancias, esto es sumamente importante, pues les garantiza beneficios en su autoestima y además aumenta las posibilidades laborales para las personas de estas comunidades en estos distintos ambientes de trabajo.
Un ejemplo: si en la compañía de teatro de tu comunidad quieren hacer una versión de La Sirenita, y fácilmente el cangrejo Sebastián puede ser un hombre negro caribeño, y hasta la bruja Úrsula puede ser una mujer negra, ¿qué pensaría la joven cantante de 14 años cuando se encuentre con cero posibilidades de tener el papel de la joven inocente, bella y buena solo por no ser blanca?
Pero si, por el contrario, cuando hace la audición para ser bruja, o un personaje secundario lleno de estereotipos, si la toman en cuenta… ¿cuál es el mensaje? El mensaje es claro y se ha normalizado por décadas, por la manera en que se representa a las personas afrodescendientes y específicamente a las mujeres negras en los medios de comunicación y entretenimiento.
El mensaje que se está transmitiendo es el de la clara exclusión desde hace mucho, así que no, la inclusión jamás estará forzada o será demasiada, si piensas así solo estabas demasiado conforme con la idea de excluir.
Ahora, si cambiamos el panorama y al momento de presentarte o aplicar para un trabajo, realmente lo que importan son tus habilidades y no tu fenotipo, ascendencia o color de piel, si pasa esto, las oportunidades pueden ir aumentando progresivamente hasta que no sea necesario incluir, pues las personas negras y racializadas siempre han sido un elemento clave dentro de la creación en las artes, y es momento de recuperar esos espacios y de llenarlos de tanto talento, dedicación y disciplina que tantas voces negras no pudieron expresar por culpa del racismo y la discriminación.