La Policía Federal brasileña detuvo este domingo a tres personas sospechosas de haber ordenado el asesinato de Marielle Franco, concejala y defensora de derechos humanos quien perdió la vida el 14 de marzo de 2018 en Río de Janeiro.
Los detenidos son el diputado federal José “Chiquinho” Brazão, su hermano Domingos Brazão, funcionario del Tribunal de Cuentas de Río de Janeiro, y el exjefe de la Policía Civil de esa ciudad Rivaldo Barbosa, lo cual refuerza que el asesinato de la concejala tuvo un móvil claramente político.
La detención, de carácter preventivo, la ordenó la Corte Suprema, que supervisa la investigación desde hace poco más de un año, cuando pasó al ámbito federal, después de unos cinco años prácticamente paralizada en Río de Janeiro.
Esta misma semana, el ministro de Justicia, Ricardo Lewandowski, había anunciado que se esperaban “novedades” sobre el caso, después de que la Corte Suprema aceptó un acuerdo de cooperación judicial con uno de los acusados de asesinar a Marielle Franco, en prisión desde hace dos años.
Se trata de Ronnie Lessa, exagente de policía de Río de Janeiro y miembro de bandas mafiosas conocidas como “milicias”, que operan en Río de Janeiro, quienes controlan muchos de los negocios ilegales en las favelas y hasta ofrecen pistoleros a sueldo.
La familia de Marielle Franco ve cada vez más cerca la justicia
La familia de la concejala Marielle Franco, asesinada a balazos el 14 de marzo de 2018 en Río de Janeiro, consideró que “la justicia está llegando”, tras la detención este domingo de tres sospechosos de haber ordenado el crimen.
“Estamos más cerca de la justicia, la justicia está llegando”, dijo Anielle Franco, hermana de la concejala asesinada y actual ministra de Igualdad Racial en el Gobierno progresista que preside Luiz Inácio Lula da Silva.
La viuda de Franco, Mónica Benicio, quien actualmente ejerce como concejala en Río de Janeiro por el PSOL, dijo a periodistas que la detención de los tres sospechosos parece dirigirse hacia “comprobar la tesis de que las milicias actúan como brazo armado de una parte del sistema político”.
Marielle fue asesinada a balazos de dentro de su automóvil, en un suceso en el que también murió su conductor, Anderson Gomes.
La concejala, del Partido Socialismo y Libertad (PSOL), tenía 38 años, era negra, bisexual y nacida en una favela. Toda su actividad política se volcó a la defensa de los derechos humanos y el combate a los grupos mafiosos que controlan decenas de barriadas en Río de Janeiro.
El ministro de Justicia señala el carácter político del crimen
El ministro de Justicia de Brasil, Ricardo Lewandowski, consideró “probada” este domingo la “naturaleza política” del asesinato de la concejala Marielle.
“Tenemos bien claro” quiénes fueron los “ejecutores” y también quiénes ordenaron “ese crimen odioso, asqueroso, que fue un crimen de naturaleza política”, declaró el ministro en rueda de prensa.
Lewandowski se pronunció después de que la Policía Federal detuvo al diputado federal José ‘Chiquinho’ Brazão, su hermano Domingos Brazão, funcionario del Tribunal de Cuentas de Río de Janeiro, y el exjefe de la Policía Civil de esa ciudad Rivaldo Barbosa, acusados de haber ordenado el asesinato de la concejala.
Según Lewandowski, “el grupo de Marielle tenía fuerte actuación” en la Cámara municipal “en defensa del derecho a la vivienda, la regularización catastral” y la destinación social de los terrenos pretendidos por esas mafias, conocidas como “milicias” y formadas por expolicías.
Fuente: EFE