Denunciamos el discurso racista y antinegro del presidente de Túnez contra migrantes negro-africanes

La sociedad civil tunecina denunció este miércoles al presidente Kais Said- que se arrogó plenos poderes en julio de 2021- por pronunciar un discurso “racista y odioso” después de que se refiriera a los migrantes de África como una amenaza demográfica para su país.

Durante el Consejo de Seguridad Nacional celebrado un día antes, Said defendió medidas urgentes contra las “hordas de inmigrantes ilegales” llegados de países vecinos, cuya presencia es fuente de “violencia, crímenes y actos inaceptables”, según un comunicado de prensa de la Presidencia.

En este sentido el mandatario señaló que la inmigración forma parte de una “empresa criminal nacida en los albores de este siglo para cambiar la composición demográfica de Túnez y hay partidos que recibieron grandes sumas de dinero desde 2011 para asentar en Túnez a migrantes” y desdibujar su carácter “árabe-musulmán”.

“Tal discurso representa una incitación al odio y la hostilidad hacia los valores de humanidad y tolerancia de los que el Estado tunecino viene presumiendo en los foros internacionales”, defendieron en un comunicado una treintena de organizaciones por los derechos humanos.

Es una verdadera vergüenza que los países norteafricanos sigan reproduciendo discursos anti-negros que ponen en el foco directamente a personas negroafricanas que ejercen su derecho a migrar.

Por si no fuera suficiente, se alian con Europa y su política anti migrantes africanes, políticas de muerte que asesinan a miles de personas africanas al año, con su complicidad.

En el norte de Africa también viven personas oscuras, y todos estos estereotipos también recaen sobre elles.

Desde Afrocolectiva denunciamos y condenamos la antinegritud que se está normalizando desde el discurso del presidente de Túnez, que está al orden del día en los países norteafricanos y que, además, justifica todas las violencias y asesinatos de nuestres hermanes negroafricanes que ejercen su derecho a migrar. Es un discurso profundamente anti-africano y arabo-centrista intolerable.

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